El poder de la fibra: el héroe oculto en tu dieta

El poder de la fibra: el héroe oculto en tu dieta

Las fibras son un elemento fundamental de nuestra dieta y tal como calificamos en el título, son héroes silenciosos cuyo trabajo es imprescindible para evitar enfermedades y trastornos gastrointestinales, ya que regulan la motilidad intestinal y contribuyen de ese modo, a la salud del organismo en su conjunto.

La expresión «fibras alimentarias», hoy tan familiar para nosotros, surge a principio de la década del 50 y refiere a compuestos concretos que forman las paredes de las células vegetales. Por tanto, se encuentran en una gran variedad de alimentos de origen vegetal.

Las preguntas claves, para aprender, para no vivir pendiente o pensando dónde están las farmacias cerca de aquí y sobre todo para tomar buenas decisiones, son dos: ¿cómo la fibra trabaja para adquirir ese protagonismo fundamental a nivel de nuestra salud digestiva? ¿Cuáles son los alimentos más ricos en fibra, que deberían ser los “imprescindibles” en nuestra dieta?

¿Cómo trabajan los alimentos ricos en fibra una vez que los ingerimos?

Comencemos por señalar que las fibras dietéticas se dividen en dos categorías: solubles e insolubles, ambas eficaces para combatir el estreñimiento.

  • La fibra soluble absorbe agua y aumenta el volumen de las heces, haciéndolas más blandas y más fáciles de evacuar. Además, fermentan a nivel del colon por acción de las bacterias intestinales, lo que produce ácidos grasos de cadena corta. Estos compuestos benefician la salud intestinal y, efectivamente, pueden estimular la motilidad intestinal.
  • La fibra insoluble no es capaz de absorber agua y pasa a través del sistema digestivo casi intacta. Su función principal es aumentar el volumen de las heces (gracias a su estructura) y mejorar la evacuación al estimular lo que se conoce como “peristalsis”, vale decir los movimientos intestinales naturales que contribuyen a un tránsito más fluido y natural.

Entonces: ¿Qué elegir? ¿Qué alimentos son más ricos en fibra y contribuyen a nuestro bienestar?

Fundamentalmente hablamos de cereales, especialmente integrales, y legumbres, pero también de verduras y frutas, especialmente si las consumimos con cáscara. Cuanto menos refinado sea un alimento, más rico en fibra será. Si no puedes consumir tantos elementos naturales, comienza a leer etiquetas con cuidado y elige aquellos con mayor porcentaje de fibra y menos azúcar.

En una Farmacia de Alta Especialidad, puedes encontrar también otro tipo de productos que contribuyan o complementen los beneficios de aumentar la fibra en tu dieta.
A modo de conclusión resumimos señalando que una dieta rica en fibra ayuda a:

  • Controlar el peso corporal regulando la saciedad
  • Tener una buena regularidad intestinal y menos episodios de estreñimiento y sus complicaciones asociadas.
  • Garantizar la salud cardiovascular: reducción de la presión arterial y de los niveles de marcadores de inflamación (por ejemplo, proteína C reactiva) en la sangre;
  • Garantizar la salud del sistema digestivo y de nuestro organismo: en particular, algunos tipos específicos de fibra, llamados prebióticos, promueven el crecimiento y la propagación en la zona del colon de las cepas bacterianas “buenas” de nuestra micro biota intestinal, como los lacto bacilos y las bifidobacterias.

Te invitamos a tomar buenas decisiones. Está en tus manos.

Consulte a su médico especialista cualquier síntoma o molestia relacionada con su salud.

La información presentada no pretende diagnosticar ni ofrecer una sustitución al consejo médico profesional.