¿Cómo diferenciar un dolor de cabeza y migraña?

Seguro que alguna vez has sentido un dolor de cabeza molesto que te ha hecho fruncir el ceño. Pero, ¿cómo saber si es solo un dolor de cabeza o una migraña? Aunque muchas veces se usan como sinónimos, son muy diferentes y reconocerlos te ayudará a tratarlos mejor.
Dolor de cabeza vs. Migraña
Un dolor de cabeza común suele ser una molestia leve o moderada que aparece por tensión, deshidratación o incluso por no haber dormido bien. Se siente como una presión en ambos lados de la cabeza y, en la mayoría de los casos, desaparece con descanso o un analgésico.
Por otro lado, la migraña es mucho más intensa y viene con un combo de síntomas adicionales. Se caracteriza por un dolor pulsante, generalmente en un solo lado de la cabeza, y puede ir acompañada de náuseas, sensibilidad a la luz y al ruido, e incluso alteraciones visuales conocidas como «aura». Este tipo de dolor puede durar horas o incluso días, y en muchos casos requiere tratamiento específico.
Factores desencadenantes y prevención
Las migrañas pueden desencadenarse por diferentes factores, como el estrés, cambios hormonales, ciertos alimentos y, sí, hasta la exposición al sol. De hecho, la protección solar juega un papel importante en la prevención de migrañas para muchas personas. Estar mucho tiempo bajo el sol sin protección puede provocar deshidratación y cambios en los vasos sanguíneos del cerebro, lo que puede desencadenar un episodio migrañoso.
Aquí es donde entra en juego el factor de protección solar (FPS). Este número indica cuánto tiempo puedes estar expuesto al sol sin quemarte en comparación con no usar protector. Por ejemplo, un FPS 30 filtra aproximadamente el 97% de los rayos UVB, mientras que un FPS 50 filtra alrededor del 98%. Si pasas mucho tiempo al aire libre, especialmente en horas de mayor radiación, usar un FPS alto es clave para evitar problemas en la piel y también reducir el riesgo de migraña por el calor.
¿Cómo tratar cada caso?
Si tienes un dolor de cabeza leve, hidratarte, descansar y tomar un analgésico de venta libre suele ser suficiente. En cambio, si estás lidiando con una migraña, lo mejor es encontrar un lugar oscuro y tranquilo, hidratarte y, si es necesario, recurrir a medicamentos específicos recetados por un médico.
Si la migraña es frecuente o muy intensa, puede ser buena idea consultar en farmacias cerca de aquí para conocer opciones de tratamiento o incluso buscar asesoramiento médico. En algunos casos, los medicamentos para el cáncer, como ciertos inhibidores de la angiogénesis, se han estudiado para tratar migrañas crónicas, aunque su uso no es común y debe ser supervisado por un especialista.
Conclusión
Distinguir entre un dolor de cabeza y una migraña te ayudará a encontrar el mejor tratamiento. Si pasas tiempo al aire libre, recuerda que la protección solar puede ser clave para evitar desencadenantes. Y si los dolores persisten, visita una farmacia o consulta con un profesional para encontrar la mejor solución. ¡Tu salud siempre es lo primero!
Consulte a su médico especialista si los síntomas son mayores.